“Lo difícil no es llegar sino mantenerse”, reza un refrán popular. En el tenis, esta premisa es aún más complicada de implementar, un deporte duro como pocos, demandante física y mentalmente, una disciplina donde cohabitan súper atletas que cada día elevan aún más el nivel del circuito profesional.
Lo conseguido por Sara Errani esta semana es sublime. A sus 35 años ha establecido una marca histórica para del deporte de la raqueta en su país: con el pase a las semifinales del WTA 125 de Bucarest, Rumanía, la transalpina ascendió a las 615 victorias para convertirse en la más ganadora de la historia del tenis italiano, superando lo establecido por Francesca Schiavone con 614 lauros.
Admirable, sería un adjetivo corto para una jugadora que ha vivido momentos apremiantes en una temporada en la que fue operada del codo derecho, un año en el que ha luchado por recuperar su confianza y su nivel, siempre con la mirada puesta en volver al Top 100 de la WTA.
El triunfo en cuartos de final del Ion Tiriac Trophy, ante Rebeka Masarova por 6-3 1-6 6-4, será resaltado de forma especial para una tenista que ya está muy cerca de ubicarse una vez más entre las mejores del planeta. Sara, que también tiene como gran recuerdo su triunfo en el WTA 125 de Contrexeville un par de meses atrás en Francia, ha contabilizado esta histórica cifra en más de 20 años de carrera, donde destaca la temporada del 2012, cuando jugó la final de Roland Garros.
Con 34 títulos individuales en sus vitrinas, la jugadora de Bolonia también alcanzó dos semifinales en Grand Slams, US Open hace una década, y en Roland Garros en 2013, además de jugar una final en el Foro Itálico en el 2014, añadiendo a sus registros la cifra de nueve coronas del circuito mayor, de las cuales ocho fueron categoría WTA International y uno WTA Premier (que hoy corresponden a 250 y 500, respectivamente).
En la modalidad de dobles, la jugadora nacida en 1987 también hizo historia al conquistar 22 campeonatos, cinco de ellos Grand Slams (ganó los cuatro) y alcanzar la cima del ranking en aquel mágico e inolvidable 2012.
Esta espléndida carrera profesional continua, cargada de confianza, con la ex número cinco del mundo buscando escalar aún más en la clasificación, un objetivo que podrá alcanzar pronto en los próximos torneos que se celebrarán en los venideros meses.
Sara, histórica. Sara, la más ganadora del tenis italiano.
Congratulazioni.